Sobre la aculturación y sus alcances y limitaciones
En este post me gustaría presentar algunas consideraciones acerca de lo que se entiende por aculturación para enseguida tratar de algunos aspectos de la teoría de la aculturación de Schumann (1978).
Se puede considerar que la aculturación consiste en un proceso de adaptación gradual del sujeto o de un grupo de una determinada cultura a otra con la cual está en contacto de modo continuo y directo. En dicho proceso, por medio de actividades de incorporación y acomodación, los sujetos reajustan sus patrones culturales a la nueva cultura. A lo largo de este proceso puede que haya pérdidas de elementos culturales tanto en los casos de asimilación total o parcial de los valores de la nueva cultura. Por ello, los fenómenos de aculturación muchas veces presuponen una pérdida continua y constante de las señas de identidad de los sujetos que adhieren a la otra cultura; de ahí las críticas a los fenómenos de aculturación por su énfasis en la asimilación cultural.
Otro aspecto que interesa mencionar es que en la aculturación hay una asimetría entre las culturas y que no se trata de un proceso lineal. Así, la cultura que se impone no logra una dominación total sobre la que sufre la intervención y la cultura intervenida no pierde totalmente sus patrones, ya que ejerce de distintos modos su resistencia. En las palabras de Mujica Bermúdez (2001), las relaciones de aculturación “están acompañadas de imágenes de los otros y de sí mismos” y como observa el autor la experiencia histórica ha señalado que el lado intervencionista parte de la prerrogativa de que es el “poseedor de la cultura” y no reconoce en el otro este mismo rasgo, lo que acentúa esa relación desigual entre las culturas.
En cuanto a la adquisición de lenguas, en el ámbito de las teorías ambientalistas se encuadra la teoría de la aculturación de Schumann (1978). Dicha teoría considera la modificación de los rasgos culturales mediante el contacto entre lenguas diferentes y entiende que la adquisición de una lengua es un aspecto más de la aculturación. Plantea que hay una correlación directa entre el nivel de dominio alcanzado en la lengua y el grado de aculturación y de acuerdo con este punto de vista para aprender una lengua es esencial la asimilación de valores y de comportamientos de los usuarios de dicha lengua. Así, el grado de aculturación y de adquisición de una lengua depende de la distancia social y psicológica entre quien aprende y la cultura de la lengua que se aprende. Con la finalidad de calcular las posibilidades de aculturación, hace falta calcular la distancia existente entre el grupo de origen del aprendiz y el grupo de la segunda lengua. La distancia puede ser real o social o percibida o psicológica.
Por lo tanto, la relación entre lenguas y culturas en contacto apunta para complejas relaciones cuyo foco es la constitución de las alteridades. La perspectiva de la aculturación se insiere en ese marco, pero no es la única vía para pensar esas relaciones.
Referencias
MUJICA BERMÚDEZ, L. Aculturación, inculturación e interculturalidad. Los supuestos en las relaciones entre “unos” y “otros”. En: Fénix 43-44 (2001-2002) Revista del a Biblioteca Nacional del Perú, pp. 55-78. Disponible: <https://red.pucp.edu.pe/wp-content/uploads/biblioteca/Luis%20Mujica.pdf>. Accedido: el 24.oct.2017