El traductor de Google. Algo más que un traductor
Muchos han echado mano, de vez en cuando, de los traductores automáticos existentes en Internet para resolver alguna duda lingüística. ¿No es verdad? Existen varias alternativas de diccionarios en línea y traductores automáticos, pero podemos afirmar que uno de los más conocidos es el traductor de Google.
La mayoría de los traductores automáticos siempre funcionaron mejor cuando las traducciones eran realizadas desde o hacia el inglés, pues las bases de datos son mayores en esa lengua. Es por eso que las traducciones entre español y portugués siempre dejaban a desear, pues eran realizadas indirectamente pasando por el inglés. Una excepción era el traductor disponible en el Centro Virtual Cervantes, que ofrecía un servicio de gran calidad entre las dos lenguas de nuestro interés, pero desgraciadamente fue cerrado a fines de 2013, por no poder competir con otros traductores, como el que aquí ocupa nuestra atención.
Bueno, pero ¿por qué es que hemos decidido hablar hoy un poco sobre el traductor automático de Google? Porque debido a las entregas anteriores en este blog, algunos profesores han pedido que se muestre un poco más sobre aplicaciones de la tecnología de conversión texto-voz (Text to Speech o TTS en inglés), y en eso, el traductor de Google nos puede ayudar mucho.
¿Alguna vez han observado que en el traductor de Google hay un ícono de un altavoz debajo de las ventanas donde se coloca el texto que debe ser traducido o donde aparece el texto ya traducido? Si hacen clic en ese ícono, se podrá escuchar una voz sintetizada que lee con bastante acierto el texto en la lengua del mismo.
En esta captura de pantalla tomada como ejemplo, fueron escritas tres frases donde hay heterotónicos, o sea, palabras iguales que se pronuncian diferentes en las dos lenguas. Al pulsar en cada ícono de altavoz, se puede escuchar en cada una de las lenguas. Eso va a permitir comparar las dos lenguas todas las veces que el aprendiz lo considere necesario hasta que consiga percibir las diferencias.
Otro detalle interesante y de gran utilidad para el profesor es que el Google genera un enlace propio para ese texto, tal como se puede ver que está destacado en la barra de direcciones del navegador usado en el ejemplo anterior. De esa forma, el profesor puede crear las frases o textos que estime convenientes y enviar los enlaces a sus alumnos, por ejemplo, con rimas o trabalenguas, que sabemos que son recursos muy utilizados en los niveles iniciales de aprendizaje.
Este es el enlace generado con las frases mostradas en la figura.
Prueben hacerlo con un trabalenguas, por ejemplo, y cuéntennos el resultado de sus experiencias.
Aquí nos hemos concentrado en la posibilidad de escuchar los textos traducidos. Sabemos que el trabajo con traductores automáticos puede ser mucho más que eso, y también que son necesarios procedimientos adecuados para mostrar a los alumnos los cuidados que se debe tener en el trabajo con diccionarios y traductores automáticos, pero ese aspecto lo dejaremos para otra entrega.
¡Hasta la próxima!